Extendemos asimismo esa solidaridad a las organizaciones y movimientos sociales que los detenidos integran. Saludamos además la decisión judicial del 20 de diciembre, que dejó en libertad a los militantes.

No obstante, manifestamos nuestra alarma y rechazo ante las detenciones de activistas que buscan movilizar un proceso de paz estancado, y quedamos en alerta y solidaridad activa y militante con la lucha del pueblo vasco por una paz justa y sólida.

Los “artesanos de la paz”, como se los ha llamado, son: Txetx Etcheverry (cofundador de Bizi, de Alternatiba y de ANV-COP21), Michel Berhocoirigoin (cofundador y ex-presidente de Euskal Herriko Laborantza Ganbara, la Cámara de Agricultura Alternativa del País Vasco), Béatrice Haran–Molle (periodista), Michel Bergouignan (cooperador vitícola) y Stéphane Etchegaray (camarógrafo encargado de filmar la destrucción de armas).

Txetx y Michel Berhocoirigoin, así como el presidente honorario de la Liga de Derechos Humanos francesa, Michel Tubiana, habían incluso redactado en octubre una carta que enviaron a la prensa, pero que no se conoció hasta el momento de la acción del 16 de diciembre.

Una parte de la misiva señala: “Nosotros nos situamos como intermediarios entre una organización armada, con la que no tenemos ningún vínculo ni subordinación, y un Estado al que queremos invitar a reflexionar. (...) Hemos decidido hacernos cargo de nuestras responsabilidades con la convicción de que esto puede ser útil a la paz. Es por eso que hemos propuesto a la organización ETA transferir a la sociedad civil la responsabilidad política de la destrucción de su arsenal militar. Hemos elegido hacerlo de manera pública y comprometida”.

Durante los días que duró la detención hubo numerosas manifestaciones de apoyo a los militantes, inclusive desde la derecha política francesa. Diversas organizaciones sociales vascas exigen a los gobiernos de España y Francia un “compromiso efectivo” con el proceso de paz y actuar sobre las recomendaciones vertidas en la Conferencia Internacional de la Paz de Aiete, en la ciudad de San Sebastián (País Vasco español).

Allí, el 17 de octubre de 2011, varias personalidades internacionales del mundo de la política y referentes de procesos de paz, en compañía de una amplia y diversa representación de partidos políticos y agentes sociales, firmaron la Declaración de Aiete, que es una hoja de ruta para alcanzar una paz justa y verdadera. Apenas días después de su firma la ETA anunció el cese definitivo de su actividad armada, pero el paso de los años no ha visto consolidarse un proceso de paz.

ATALC es una red de organizaciones que luchamos por la justicia ambiental plenamente comprometida con la paz, la soberanía y la autodeterminación de los pueblos. Asimismo, no puede haber justicia ambiental sin justicia social, y en la búsqueda de esta última la paz es un elemento básico esencial. Expresamos nuevamente nuestra solidaridad con los militantes detenidos, sus familias, las organizaciones y movimientos sociales de los que son parte, y nos mantenemos alertas en apoyo a la lucha del pueblo vasco por paz y justicia.

Amigos de la Tierra América Latina y el Caribe (ATALC).