9 de noviembre de 2009 | Entrevistas | Agua
El agua no aparece
Grave crisis hídrica afecta a toda la provincia argentina de Córdoba
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Con sus bosques nativos devastados en un 96%, un deficiente mantenimiento de la red de agua y la creciente presión inmobiliaria, las cuencas cordobesas se encuentran secas y los ríos, arroyos y acuíferos, contaminados. La denuncia de la situación la realizó la semana pasada la Coordinadora Córdoba en Defensa del Agua y la Vida (CCODAV) al llamar la atención sobre la ruptura de todo el sistema hídrico provincial.
Al tiempo que insistió en crear una empresa estatal de agua pública bajo control de usuarios y trabajadores, la CCODAV señaló al complejo agroexportador como uno de los principales causantes de esta emergencia hídrica, al llevarse para la producción el 75% del agua disponible. «Solamente el 5% queda para el consumo humano en una población estimada de más de 2 millones de habitantes. No hay obras de extensiones de red. Hay localidades como la de Rayo Cortado donde están sin agua los pozos, se han secado, y el lugar más cercano es a 20 kilómetros», dijo Oscar Martínez, militante del MTR ―uno de los movimientos que participa de la CCODAV―, en comunicación con Radio Mundo Real.
El activista de la coordinadora agregó que tanto el gobierno local como la prestadora del servicio de agua ―la trasnacional Suez― tratan de culpabilizar a los ciudadanos cordobeses por la actual escasez de agua. «Nos hacen creer que porque usamos el inodoro dos veces por día, porque lavamos los platos o porque queremos baldear una vereda, somos culpables de la falta de agua, cuando en realidad acá una solución urgente y rápida sería una intervención del Estado, con sus organismos de control, sobre las empresas, para evitar el derroche cerrándole el grifo al complejo sojero», apuntó Martínez.
Según afirma la CCODAV, las sucesivas campañas agrícolas ―con una proyección de siembra de 5,7 millones de hectáreas para el próximo año― convirtieron el territorio provinicial en una región de desiertos cuyos ciclos naturales, del agua, el clima y los ecosistemas, se hallan «heridos de muerte».
Para esta semana la coordinadora convocó una asamblea de urgencia y espera movilizarse fuertemente: «Vamos a hacer una intervención callejera en pleno centro de la ciudad bajo la consigna "tomemos el agua", porque nos parece que esa tiene que ser la consigna para romper el discurso», explicó el referente del MTR.
«Contamos con los recursos hídricos necesarios para abastecer a la ciudad, el problema es qué se prioriza primero: la posibilidad de que podamos tener un vaso de agua en nuestras casas o esas nefastas plantas transgénicas», concluyó Martínez.
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