«Nos llama mucho la atención, (...) hay muchos actos de calumnias y de provocación, que vienen de manos de empresarios y de algunos funcionarios políticos de alto rango», afirmó Benigno López, presidente de Co’eyú y referente del MOCAFOR. «El 95% de preparación de suelos, el manejo de suelos, lo hace la cooperativa», agregó.

Con el trabajo que lleva adelante Co’eyú se intenta nuclear a los pequeños productores para el desarrollo de emprendimientos productivos en la zona. «Es decir, estamos en la primera etapa todavía ―cuenta la cara más visible de la cooperativa―, estamos en pañales, y antes de que la criatura camine están tratando de matar a la criatura».

El dirigente campesino señaló que detrás de estos hechos estaría el Fondo Fiduciario Provincial (FONFIPRO), un ente del estado provincial que le disputa al MOCAFOR la administración de un local recuperado por los campesinos y donde el FONFIPRO maneja una desmotadora de algodón: «Hay lavado de dinero a través de lo que es producción de algodón de poderosos dirigentes políticos. El desmonte de ese algodón se hace en esta desmotadora que administra el FONFIPRO», advirtió López.

En el local en pugna, 20 años atrás funcionó otra cooperativa que fue llevada a la quiebra, robada y vaciada por sus entonces administradores. El MOCAFOR rescató del abandono el lugar, allí instalaron las oficinas de Co’eyú, adquirieron tractores, implementos, herramientas y equipos de computación. López explicó: «Todo lo que la cooperativa va adquiriendo lo tenemos ahí».

En Argentina, activistas, comunidades y movimientos sociales pueden comunicarse con nuestros corresponsales a través del correo electrónico.

Foto: http://argentina.indymedia.org/